¿Qué es el ESP?

El sistema ESP responde a las siglas en inglés de Electronic Stability Programme, que traducido es el Control Electrónico de Estabilidad. Se trata de un sistema de control automatizado instalado en vehículos para ayudar a los conductores a mantener el control de sus vehículos en diversas situaciones. Para ello, combina sensores y controladores electrónicos para detectar el giro, la velocidad, la dirección e incluso el lado de la carretera en el que está el vehículo. Esta información se transmite a la computadora del automóvil, que monitorea los patrones de conducción para detectar si el vehículo está a punto de perder el control.

Cuando el coche se desvía de su dirección, el sistema ESP usa una combinación de control de motor, frenados individuales de rueda y estabilización automática para ayudar a que el vehículo vuelva a su dirección correcta. Por eso se trata de uno de los sistemas de seguridad activa.

¿Cómo se activa el sistema ESP?

Normalmente, el sistema ESP se activa de forma automática cuando detecta una pérdida de tracción o un deslizamiento en las ruedas, que puede ser habitual en curvas cerradas tomadas a alta velocidad. Una vez activado, el sistema es capaz de regular el torque, la fuerza motriz y el frenado para mantener el coche en línea y evitar una pérdida de control. Cuando entra en juego se enciende una luz en el cuadro de mandos, aunque también cuando se ilumina este testigo puede significar una avería en este sistema.

¿Qué sensores usa el ESP?

Para saber cuándo debe actuar, el sistema ESP cuenta con varios sensores que le ayudan a corregir la trayectoria de nuestro coches. A continuación, te detallamos cuáles son y su función:

Sensor de ángulo de volante: la única manera que tiene el sistema ESP de saber dónde queremos ir es a través de la posición del volante. Por eso, este sensor nos muestra hacia dónde y con qué fuerza lo hemos girado.

Sensores de giro de rueda: manda la información al sistema de la velocidad de giro de cada rueda de nuestro coche

Sensores de aceleración lateral: Estos sensores muestran si el coche está realizando bien una maniobra. Por ejemplo, si el sensor del volante le dice que está girado a la derecha, pero no hay una aceleración lateral, significa que el coche sigue recto y que, por lo tanto, debe actuar.

Un giroscopio: este sensor muestra al sistema si el vehículo está intentando girar sobre su propio eje y hacer el giro como si fuera una peonza.

¿Todos los coches tienen control de estabilidad?

Desde 2015, todos los vehículos nuevos con una masa inferior a las 3,5 toneladas deben de equipar el sistema ESP en su versión de serie. Por lo tanto, esta norma afecta tanto a los turismos como a los vehículos comerciales ligeros. Sin duda, las leyes buscan así mejorar la seguridad vial y prevenir posibles accidentes.

¿Qué hay que hacer cuando se activa el ESP del coche?

En el momento en que el ESP entra en acción, notarás una vibración y un ruido metálico provocado por el sistema de los frenos del coche, ya que se libera y actúa según la necesidad del sistema. Como mencionamos anteriormente, la única forma que tiene el sistema de saber hacia dónde queremos ir es mediante lo que le indicamos con el volante, por lo que es muy importante que le demos esa información al sistema.

Sin duda, el principal beneficio del sistema ESP es que reduce la probabilidad de un accidente. Además, también mejora el manejo del vehículo, sobre todo en situaciones de mal tiempo o en carreteras en curvas.